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COMUNIDAD CRISTIANA COMUNIÓN
Una comunidad de gracia, abierta e incluyente.
QUIÉNES SOMOS
Somos una congregación alternativa cuyos miembros provienen de diferentes tradiciones y denominaciones (ecuménica), también contamos con un grupo de hermanas de otros estados de la república Mexicana.
Encontramos en nuestra comunidad que la salvación es brindada a todos y a todas por la sola gracia de Dios y por la sola fe, Cristo Jesús cuando nos acepta nos ha dado a toda persona su perdón y una vida nueva y abundante, ya que nuestro modelo es aquel Jesús que siempre sale al encuentro de todas y todos los excluidos y que entorno a una mesa cena con todas ellas como gesto de reconciliación y comunión.
Encontramos a Dios en la reflexión bíblica comunitaria; en las escrituras encontramos la Palabra de Dios, en el canto comunitario expresamos arte y la cultura de cada congregante, en las relaciones de afecto y de apoyo vemos al Espíritu Santo, en la celebración y en el compromiso creativo con el mundo encontramos a Cristo encarnado.
Con sencillez de corazón queremos decir que la Iglesia esta llamada por Dios a ser curada de sus exclusiones y de sus miedos que han fundamentado muchos gestos de estigmatización, por lo que experimentamos en ese caminar con Cristo nuestra propia vulnerabilidad y nuestra propia finitud, por esto, decimos que a través de Jesús somos llamados/as a ser libres, a vivir en gracia y al amor incondicional de Dios.
La Congregación Comunión es una comunidad de fe que acepta la invitación de Jesús a seguirle en el amor, justicia y paz, en el servicio, atreves de los dones y las vocaciones.
Nuestros procesos colectivos de participación en comunidad reflejan nuestro compromiso con la igualdad y la diversidad. Nos esforzamos por crear oportunidades para que cada uno de los integrantes de nuestra comunidad exprese sus opiniones, prioridades y creencias. Mientras nos escuchamos unos a otros, somos guiados por Dios a través de la oración y en discernimiento comunitario.
Estamos comprometidos a mantener nuestros valores divergentes: somos una comunidad muy unida que da la bienvenida a toda persona sin importar su tradición o su fe; valoramos nuestras muchas diferencias y estamos unidos/as en nuestra identidad como seres humanos, a caminar juntas y juntos en el proyecto de Jesús.
Experimentamos el espíritu creativo de Dios que trabaja a través de la historia y el carácter de nuestra congregación. Buscamos una mayor conciencia de las necesidades sociales y espirituales de nuestra comunidad a nivel local y global, oramos para ser fieles en escuchar y responder al llamado de Dios.
PRÓXIMOS EVENTOS
Nuestro calendario de eventos
Las palabras no son suficientes para describir nuestra comunidad cristiana. Una visita te permitirá vivir la experiencia. Conoce más sobre nosotros y la influencia sobre como compartimos la palabra de Dios en la Comunidad Cristiana Comunión. Asiste a alguno de nuestros próximos eventos, actividades y proyectos locales. Acércate y conócenos.
CREDO COMUNITARIO COMUNIÓN
Creemos en el Dios de la vida como, Padre y Madre que tiernamente camina con nosotras/os, que siempre está con nosotras y nosotros dando amor sin distinción y con su energía nos alienta cada día.
Creemos en Jesús como compañero de esperanzas que no nos deja, amigo en la complicidad, salvador en la desgracia, platicando en lo íntimo todos los días de nuestra vida.
Creemos en el Espíritu Santo que es la esencia de cada persona, manifestado en cada una de ellas en la amistad y hermandad, humanizado y encarnada como Dios comunidad.
Encontramos en nuestra comunidad de fe, que la salvación es brindada a todas y a todas las personas por la sola gracia de Dios y por la sola fe, Cristo Jesús cuando nos acepta nos ha dado a toda persona su perdón y una vida nueva y abundante, ya que nuestro modelo es aquel Jesús que siempre sale al encuentro de todas y todos los excluidos y que entorno a una mesa cena con todas ellas como gesto de reconciliación y comunión.
Con estos 5 ejes nos apoyamos para reflexionar en torno a nuestra espiritualidad y mirar a Jesús humano como el centro del cristianismo y de nuestra fe.
P roclamación
E vangelio
S ervicio
C omunión
A doración
PROCLAMACIÓN
En Comunión vemos estos ejes importantes en nuestra formación como seres humanos y cristianismo, comprometidos al proyecto de Jesús, así que, veamos que pensamos y creemos en la Proclamación.
Que viene de la palabra “kerigma” que significa “proclama”, “declaración”, “pregonar”, “anunciar”, “dar a conocer”, “predicar”. promesa hecha por un heraldo (mensajero).
“Proclamar” (kerygma) aparece 61 veces en el NT. El sentido, va en el acto de anunciar, es el kérygma como acontecimiento de comunicación.
Con el mismo acto de anunciar existe un acto en la trasformación, de la Buena Nueva (propuesta) y se invita a la conciencia y libertad humanas a la adhesión vital (respuesta).
Basta anunciar el kérygma para que adquiera carácter de diálogo: el anuncio del kérygma espera una respuesta porque es propuesta divina que interpela al hombre como tal.
La proclamación del kérygma, aceptado por la fe y la conversión, pone en acto el Reino de Dios (proyecto de Dios), sus valores y su cosmovisión.
(Flp 2,9-11)... Por esto, la adhesión al kérygma introduce al cristiano en el Reino de Dios.
Los Hechos de los Apóstoles nos ayudan a responder una pregunta importante: ¿cómo es este Kérigma o proclamación de una manera práctica y cotidiana? O ¿cómo eran estos actos de comunicación en vista de la iglesia del Primer Siglo?
1. Modo: “charlando”, “enseñando” (4,18), “dialogando”, “conversando con familiaridad” (20,11).
2. Argumentación: “discutiendo” (17,2.17), “persuadiendo” (18,4; 19,18).
3. Tiempo: una “larga conversación” (15,32).
4. Compromiso del llamado heraldo: “declarando enfáticamente” (28,23).
5. Lugar: en el desierto (Mt 3,1), ciudades (11,1) y sinagogas (Hch 9,20); entre nosotros (1 Tes 2,9), en la Decápolis (Mc 5,20) y entre los gentiles (Gál 2,2); en todo el orbe (Mt 24,14), en todo el mundo (26,13), en toda la creación (Col 1,23).
6. Contenido: la “Palabra” (8,25; 15,35) o “de Dios” (18,11), todo “el plan de Dios” (20,27), el “reino de Dios” (19,8), la buena nueva “de Jesús” en cuanto “Mesías y Señor” con el sentido de su vida, según las Escrituras (5,42; 11,20).
EVANGELIO
La palabra evangelio viene del griego, evangelion (εὐαγγέλιον), que significa buenas nuevas, buenas noticias.
La palabra evangelio se encuentra poco más de 100 veces en la Biblia. Algunas ocasiones se menciona de manera aislada y algunas otras le sigue la frase: “del reino”. Mc.1:14“El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado. ¡Arrepiéntanse, y crean en el evangelio”
El evangelio son las buenas nuevas de la muerte, sepultura y resurrección de Jesús por nuestros pecados (1ª Corintios 15:1-4) según Pablo.
Es el mensaje de lo que Dios ha hecho por nosotros, nuestra liberación y del castigo de la ley.
SERVICIO
De la palabra en griego diakonia, designa la tarea o servicios en la iglesia del primer siglo.
En el Nuevo Testamento encontramos 34 veces esta palabra y se refiere a varios aspectos como:
Se llama diaconía al servicio que presta una persona en alguna casa, a quien en nuestro medio se le llamaría sirviente. Se le llama diaconía también al trabajo que hacen los meseros al llevar la comida a la mesa, y estos aspectos los encontramos en San Lucas 10:40 y Hechos 6:1.
Más adelante y con el correr de los tiempos, se denominó diaconía al servicio genérico, (1ª . Cor. 16:15, Ap. 2:19).
Se habla más del concepto de diaconía en Hch 11:29, 12:25, 2ª Co 8:1-9, y aquí se refiere a las obras de caridad; se recogen colectas u ofrendas entre los cristianos para una ayuda benéfica.
El trabajo o la ayuda se hace motivado por la gracia de Jesucristo para con nosotros; el amor de Jesucristo inspira la acción diaconal.
Efesios 4:12 se refiere a la tarea de servicio que se hace en la comunidad. De aquí en adelante el servicio o diaconía se practica hacia los demás sin ver a quien, lo importante es ser prójimo del que sufre y que necesita ser servido.
En la diaconía se constituye ser brazo o mano de Dios al mundo, al servicio de la comunidad sin acepción de personas.
Queremos ser” proyectos de amor” diría Lorena Trejo (integrante de nuestra comunidad) y buscamos hacer proyectos vecinales o que van dirigidos a los más necesitados.
2 Corintios 5.18-19 “Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio (servicio) de la reconciliación (humano con humano):
Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.”
KOINONIA
Palabra griega derivada del verbo “koinoneo” (“participar en algo indivisible”, “comunicar con”, “tener comunión en”) y que en las versiones castellanas se traduce por comunicación, comunión, comunidad, participación (Hch. 2:42; 2 Co. 6:14).
¡Qué bueno, qué agradable es/ que los hermanos vivan juntos! Salmo 133.1
Todos se mantenían constantes a la hora de escuchar la enseñanza (didajé) de los apóstoles, de compartir lo que tenían (koinonía), de partir el pan (klásei) y de participar en la oración (artou kai tais proseujais). El grupo de los creyentes estaba totalmente compenetrado en un mismo sentir y pensar, y ninguno consideraba de su exclusiva propiedad los bienes que poseía, sino que todos los disfrutaban en común. Hechos 2.42; 4.32
La posibilidad efectiva de encontrarse con Dios en el templo se complementa siempre con el acompañamiento físico, la camaradería y el compartir con los demás creyentes.
Sin importar su procedencia, el acercamiento y la amistad hacían de estos encuentros unas verdaderas efusiones comunitarias que exaltaban el espíritu de fiesta y de compañerismo en la fe. Es lo que celebra el salmo 133: la belleza y armonía de la comunión.
Estar juntos forma parte de la bendición divina que da resultados tangibles. “Vivir juntos” es una utopía “y Dios nos libre” pero si podemos celebrar los encuentro y los re encuetros.
En lenguaje coloquial, se trata de estar “juntos y revueltos”, más allá de las diferencias que tienden, socialmente, a separar, y esta separación “beneficia” a otros:
El término yahad que traducimos como “juntos”, debe ser entendido también en el sentido de “comunidad”, “con cada uno”. De nuevo, “habitar juntos” sugiere experiencias relacionadas con un contexto en el que la soledad es una realidad y además valorada negativamente. ¿Qué estará pasando que es recomendado estar “juntos/as”?
En Hch, en la descripción de la vida de la primitiva comunidad, se nos habla también de la comunidad de bienes que en ella se practicaba. Este “comunismo religioso basado en el amor” de la primitiva comunidad era la consecuencia de un amor carismático, pero tenía como supuesto la permanencia de la propiedad privada, así como la voluntariedad de la ofrenda y de la ayuda al necesitado.
No conocía ni la producción ni el consumo colectivo, no estaba organizado ni tampoco hay que concebirlo a partir de categorías económicas. Surge de aquella ausencia de inquietud que predicó Jesús y de su ilimitado desprecio de las riquezas (Mt 6.25-34) y hay que reclamarlo como continuación de la vida en común que Jesús realizó con sus discípulos (Lc 8.1-3; Jn 12, 4 ss; 13, 29).
ADORACIÓN
“Pero se acerca el tiempo de hecho, ya ha llegado cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad. El Padre busca personas que lo adoren de esa manera. Pues Dios es Espíritu, por eso todos los que lo adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad.“ Juan 4:23-24
El significado de la palabra griega en el Nuevo Testamento traducida más a menudo como "adoración" (proskuneo) es "postrarse delante" o "arrodillarse delante.
El ser humano parece que es un ser de adoración. Los hombres en todas partes rinden homenaje a, o pagan respeto a, algún ser.
Nunca ha sido encontrada una raza o tribu de hombres que no tuviera alguna clase de adoración. Los hombres innatamente parecen sentir la necesidad de adorar algo.
La Biblia enseña que uno de los propósitos del hombre es la glorificación de Dios. Pablo dijo: "Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu..." (1 Cor. 6:19-20).
Esta elección y bien estar personal en la parte del hombre por glorificar a Dios es lo que queremos decir por adoración.
La adoración en la biblia parece que siempre ha sido sacrificial, por ejemplo:
Abel ofreció sacrificio animal acorde a la voluntad de Dios (Heb. 11:4). A Abraham le fue ordenado ofrecer a su hijo, Isaac, como sacrificio para Dios, aunque Dios detuvo su mano cuando vio a Abraham temiéndole (Gén. 22:1-19).
Los judíos, por mandato de Dios, ofrecieron sacrificios animales de muchas clases.
En el N.T ofrecer sacrificios es hablar del ser integral tanto físico y espirituales (1 Ped. 2:5), por lo que no hay que separar el espíritu con el cuerpo, por lo que la invitación es presentar nuestro cuerpo como un sacrificio vivo, santo y agradable a Dios (Rom. 12:1-2).
De esta manera vemos que la adoración en toda época, ha sido sacrificial y hoy queremos por la sola gracia resignificar la adoración para con Dios y el ser humano.
A labanza
D arnos
O ración
R espuesta
A marnos
R
L iturgia
E spiritualidad
Porque en el evangelio la justicia de Dios se revela por fe y para fe, como está escrito: Mas el justo por la fe vivirá.
Romanos 1:17
